26 jul 2005

gajes del oficio



la escritora está confundida. el calor la atonta, la ciudad la agobia. no sabe adónde vivirá en cinco días más. no sabe si quedarse o partir, al menos por unos meses, descansar de New York. el fin de semana ingirió unos hongos en la playa, pero no alcanzaban para Reymundo, el pintor chileno que la invitó, por lo que bajó un poco para poder comunicarse. el regreso a la ciudad la tiene algo deprimida, sin ánimo para trabajar. los robos la están desgastando. el amante misterioso también. acaba de llamarlo. la primera vez respondió algo extrañado y la comunicación se cortó. la segunda le pidió que fuera más cuidadosa, que no estaba solo y que tratara de llamar a la hora correcta. Esta es la hora correcta? No. Entonces cuándo? Viernes o sábado en la noche. Ok, bye. bye. En estos momentos le gustaría verlo de nuevo, follárselo -por supuesto- y despedirse. Le empieza a parecer demasiado complicado.

12 jul 2005

Re: pista

To: “Malinalli Alcázar” malifly@hotmail.com

Es la misma pregunta que me hice al leer el libro que figura abierto sobre la cama de la mujer del 6o a las 8 am de un día cualquiera (porque en realidad son varios días distintos que en el relato confluyen en uno) en marzo del 2004 en el Hotel Virreyes, Izazaga con Eje Central, Ciudad de México.
Ahora déjame la curiosidad a mí: a qué se debe tu interés en esos tres simples datos: día, mes, año.


miércoles. julio, 14
una sensación de fracaso ligada a la palabra amor, a ese vocablo que juego a deletrear mientras tropiezo una y otra vez con hombres adorablemente ajenos.

From: "Malinalli Alcázar"
HOLA ALINA
¿Comò estas,en que parte del mundo te encuentras ahora?
Claro que respondere a tù pregunta.
Cuidate mucho en donde quiera que estés te mando un fuerte abrazo.
GRACIAS

11 jul 2005

día, mes, año



la noche ha sido larga, la semana. de fiesta sin beber nada, nueva modalidad. en guerra contra fantasmas (el propio incluido) y los kilos de más. despierta, demasiado despierta, intentando algún grado de equilibrio, por precario que sea. La pintora española y su visita polaca se marchan mañana. Por eso toda la semana anduvieron de fiesta en el bar en que conoció al amante jamaicano. Hoy volvió a verlo llegar acompañado de una nueva chica. Cuando ésta se dio vuelta, él saludó con un pequeño beso en la boca, hizo el gesto de tener que entrar, luego fue más claro y dijo que no podrían irse juntos. Entiendo, dijo la autora y salió a fumarse un porro. Vio romance alrededor, un tipo de color se le acercó, pero no sintió feeling y siguió pensando en lo extraño que suele comportarse el amante jamaicano, tal vez efectivamente sea traficante (como propuso Patricia), guía de turistas o prostituto, como pensó la primera vez que lo vio. O sólo demasiado guapo, como volvió a proponer acertadamente Patricia. La noche fue algo de celos, ganas de investigar acerca del tipo en cuestión sin decidirse a preguntar al portero proveniente de Africa, que estaba ligándose a la polaca. la noche fue un enredo de emociones entrecruzadas o es sólo que se prepara para volver a sumergirse en las páginas del libro. la noche ha sido tan larga tomando agua, fumando porros, viendo al amante una vez más irse con otra. caminando a su ex casa, Broadway 321, con un negro que se empecinó en ser su sombra y al que le dijo una decena de veces tú no me gustas. pero al mismo tiempo cometió el error de estirar la cuerda, darle un pequeño beso en la boca como despedida, lo que lo animó a insistir, colarse por la puerta del edificio y seguirla hasta el 3o, donde esperaban la pareja conformada por la polaca y el africano. lo primero que hizo cuando éste último consiguió echar al tipo, fue apropiarse del computador, y largarse a escribir lo sucedido. los celos aún rondándola, se lo dijo al menos al oído, i feel little jealous. Don´t be, respondió el hombre bello y se perdió en el baño. Siempre tan rápido, sin detenerse ni un momento, o pocos, siempre mirando el reloj y teniendo que irse de un lado a otro, sin permanecer en ninguno, como si se ocultara o quisiera resarcirse de algo.Y la autora empecinada en que esto se convierta en una novela y desenmarañar algún misterio. Pero no, cada vez se enredaba más. Como hoy cuando intentó explicar al editor del periódico cómo era su libro: el diario de un personaje, dijo. Y él preguntó ¿cómo los detectives salvajes? Y ella, ojalá fuera así. Como cuando por fin se atrevió a preguntar por Terry al africano, dijo no creer que fuera casado y desconocer si tenía muchas novias, porque siempre lo veía llegar con más amigos. En fin, nada en limpio. Al llegar a casa, aún con los celos a flor de piel, la esperaba una sorpresa. Por fin alguna comunicación con un lector desconocido.


Rafael Salmones wrote:

Hola, Alina...

¿Cómo va esa vida nómada? ¿En qué parte del mundo estás ahora?
Aquí abajo encontrarás un correo que me llegó referente a "El otro diario de Alina Reyes". Yo ya le he respondido que el texto no es mío y que no tengo idea de los datos que ella quiere, pero que te haría llegar su pregunta tal como prometí al publicar tus textos.
Debo confesar que me ha nacido la duda de por qué esta mujer (supongo que es mujer por el nombre) tiene tanto interés en esos datos, de modo que si quieres mantenerme informado sobre tu eventual respuesta a ella y lo que de ahí derive, te lo agradeceré.

Recibe un mexicano abrazo.
Rafael Salmones


----- Original Message -----
From: "Malinalli Alcázar"
To:
Sent: Sunday, July 10, 2005 9:24 PM
Subject: solo una pregunta

¿En qué fecha sucedió lo que escribes en "el otro
diario de alina reyes (3)"?
por favor dime la fecha; día, mes y año.

gracias



3 jul 2005

mala hostia

La autora figura de buzo negro, el computador portátil colgando de un hombro. El poeta, editor también de la revista cultural alternativa, acaba de pelearse a muerte con ella por haber vendido la entrevista con la cantante mexicana a otro medio. El editor insiste en la palabra exclusividad. “El caso es que yo no creo en ese concepto”, rebate la reportera free lance, apagando la pantalla en que aparecía el texto en cuestión, recogiendo sus cosas, yéndose con rabia suficiente como para lograr publicar la entrevista en otro sitio.
Ahora espera, en HyM, que la mujer de un país oriental y remoto, se decida a comprarle un poco de crédito en su gift card, la tarjetita en que suma cada prenda robada y devuelta.

2 jul 2005

West 4

La reunión con el ex amante polaco, situación que no debería haberse extendido más allá de esas tres noches, agradables, pero no extraordinarias, bueno, quizás una de ellas lo fue, pese a las dificultades idiomáticas, a las diferencias personales, a los cuerpos que no se acoplaban. Pero era eso. Nada más. Por qué vino? Está claro que a buscar su bolsita de marihuana. Pidió un momento más largo, pero es él quien tiene que irse, y casi se duerme mientras ella se esfuerza por llenar los momentos sin interés. Se aburre sobremanera mientras lo acompaña al subway, oyéndolo hablar del futuro y su vida, pensando si decirle que no llame más, pero ni siquiera es necesario. Al despedirse en la entrada al subway sólo le desea “good luck”.