20 jun 2006

secreto

En la lengua su recuerdo, magenta el brillo en los ojos, atesoro las palabras, unas pocas pronunciadas al oído de alguien, las risas, la sed posterior, las ligas protegiendo las piernas de la brisa otoñal después al regresar a casa.

Viu manent, Carmenere 2005.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Año 2000: vi que dormía o se hacía la dormida pilucha sobre la cama. La luz de los postes de la calle, convertida en franjas por las persianas, le listaron el cuerpo como si fuera una cebra. Una cebra humana. Antes, me esperó de pie en la ventana con una bandeja de empanadas fritas y vino blanco. Acostados, las comimos en silencio, viendo televisión abierta: anodinas películas de la madrugada. Después, en la oscuridad, tuvimos sexo. En algún momento dijo la palabra pérdida. Antes, en otro momento, le dije que tenía gusto a queso. Me levanté al alba.

Santa Helena, blanco, 2000 (en caja)
Federico

Antonio Mundaca dijo...

paisaje oral

PàjaroEnPecera dijo...

existe diferencia entre la caja o la botella si el contenido es el mismo y las intenciones no son serias.
descabella la idea o es que acaso la honestidad se censura ante el instante que flagrante inunda los cuerpos y coloca a rodar en un incesante ir y venir como el viento que juega con los humos desde la proa al estribor...prost!