6 sept 2006

despedidas


el círculo rodeando a la luna, el perfil de los cerros, la ciudad iluminada, el último trago, la última comida, la gente a la que no llamé, los amigos sumados, los libros restados, la caminata en silencio bordeando el Forestal un lunes a las 3 de la mañana, los besos tímidos, el rostro de adolescente del chico, los gritos de los pájaros, la pérdida de la costumbre, el entrechocar de copas, los ruidos de la nueva construcción frente a la casa del chico, su rostro tan distinto al mirarlo de cerca en un primer plano, el sueño con piezas de arte político mientras él me acariciaba, el gentío, la notaría, el albacea, el río sonando, sus aguas sucias, los cheques que no llegan, los bolsillos vacíos, la vacuna contra los nervios, los dólares prestados, la fuerza acumulada en estos meses que no alcanzo a agradecer porque me faltan las mismas palabras a la hora de definir a qué se debe el viaje. la intensidad de otra ciudad montaña rusa llevándote arriba tan rápido como abajo. el vértigo que espera por mí en cuanto descienda del avión.

1 comentario:

Iván Rosales dijo...

hay viajes que no tienen vueltas, otros que solo lo hacen en círculos, otros en espiral mareando cabezas y dando espasmos a corazones, palabras tuyas llegan dentro muy dentro al leerlas y mas adentro luego de sentirlas.
saludos y gracias por las melancolicas palabras que leí acá